VAMOS A CLASES

SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO
Libro Hacia la Sociedades del Conocimiento
Hacia la Sociedades del Conocimiento.pdf (5,363 Mb)


DURACIÓN MÁXIMA 160 HORAS
Asesorias y acompañamiento directo 60 HORAS
Plataforma Blackboard 100 HORAS
REQUISITOS DE INGRESO Docentes de los Centros de Formación del SENA
1. COMPETENCIAS A DESARROLLAR
Competencia:
Orientar procesos formativos presenciales con base en los planes de formación concertados. (NCL Docencia) Elemento de competencia:
Planear procesos formativos en la modalidad presencial de acuerdo con el plan de estudios, las características del estudiante y los lineamientos institucionales.
Elemento de competencia:
Ejecutar procesos formativos en la modalidad presencial aplicando estrategias metodológicas pertinentes según el estudiante.
Competencia:
Orientar procesos formativos en la modalidad a distancia con base en los planes de estudio Elemento de competencia:
Planear el proceso formativo en la modalidad a distancia de acuerdo con las competencias a desarrollar, las tics y las características del estudiante.
Elemento de competencia:
Asesorar a los estudiantes para el desarrollo de sus competencias y logros académicos de acuerdo con el plan de estudios.
2. PRESENTACIÓN DEL PROGRAMA

Con el advenimiento de la construcción de una economía basada en el conocimiento, la innovación y la tecnología, el papel de la educación es fundamental, en tanto que los conocimientos cambian en un espacio de tiempo más corto que la vida de una persona, lo que implica que tengamos que reciclar y renovar con mayor frecuencia nuestros conocimientos, en lapsos de tiempo muy cortos. Si antes se hablaba de una educación para la vida, hoy debemos asumir una educación a lo largo de nuestras vidas.

Las instituciones educativas seguirán siendo necesarias para una etapa de la vida de las personas, pero habrá que plantearse un fuerte cambio en contenidos y metodología.

El nuevo modelo deberá propender por desarrollar y valorar las competencias y las capacidades de las personas. Los recursos humanos se han de gestionar más de modo individual que colectivo. Se trata de que nos demos cuenta que hay que construir una sociedad nueva para la humanidad, no para la tecnología.

En ese sentido la labor docente ha ido cambiando desde un enfoque centrado en el profesor y basado en clases magistrales en el cual el estudiante es considerado como pozo de la ciencia, hacia una formación centrada principalmente en el alumno dentro de un entorno interactivo de aprendizaje, que le proporciona los elementos necesarios para que adquiera la capacidad de aprender a aprender y a desaprender y así mismo a vivir en una economía globalizada, en la cual la calificación y el conocimiento tienen cada vez más importancia, ya no para el éxito, sino para la supervivencia económica.

Es pues tarea de los docentes dotar a los estudiantes de la información y los conocimientos necesarios y útiles como un ejercicio de economía mental fundamental en un mundo que se transforma rápidamente y se inunda de información, en algunos casos innecesaria. En ese sentido, la mejora de la calidad del proceso de enseñanza aprendizaje pasa necesariamente por la transformación del pensamiento y de los sentimientos de los profesores, para poder asumir el reto de comprender y aplicar un nuevo concepto de aprendizaje que propone la Institución en su Plan Estratégico 2007- 2009, en consonancia con las transformaciones y exigencias del mundo contemporáneo.

El desafío es entonces, mantener una dinámica de constante cambio y permanente innovación en la que se materialicen las estrategias metodológicas y pedagógicas, alrededor del aprendizaje a lo largo de la vida, en el que juega un papel primordial, no solamente el docente, sino también las diversas fuentes de adquisición del conocimiento que hoy se presentan en los procesos de aprendizaje (el instructor, el ambiente de aprendizaje, el entorno y las TICs).

Pero esta concepción de una educación a lo largo de toda la vida, exige que los docentes actualicen y mejoren sus capacidades didácticas y sus métodos de enseñanza, es decir que mejoren sus competencias pedagógicas, por lo tanto, la formación docente debe concebirse como un proceso de permanente adquisición, estructuración y reestructuración de conocimientos, habilidades y valores para su mejor desempeño. La formación docente hay que concebirla como continua, a lo largo de toda la práctica docente, tomando dicha practica como el eje formativo estructurante.

Vale la pena traer a colación una visión actual de la formación profesional, porque indica de alguna manera cuales son las nuevas responsabilidades de la labor docente en cuanto la gestión para el aprendizaje permanente.

“La formación profesional se ha transformado en un factor de suma importancia ante el advenimiento de nuevas formas de organizar y gestionar la producción y el trabajo. Esto es así porque el conocimiento adquiere una centralidad inusitada con relación a otros factores productivos como la tierra, los bienes de capital o la tecnología. Y la formación profesional es un vehículo privilegiado para acceder a dicho conocimiento y difundirlo”.

“La formación profesional no se encuentra ya dirigida a calificar para el desempeño en un puesto de trabajo específico, sino que se orienta a entregar y potenciar competencias aplicables a una variedad de situaciones laborales y áreas de ocupación.
Lo cual responde también a los cambios en los modelos de organizar el trabajo y la producción, así como a la nueva realidad del mercado de trabajo. Los trabajadores activos y empleados difícilmente permanecen en la misma función y realizando las mismas tareas. Cada vez más se les exige que sean capaces de movilizarse por las distintas fases del proceso de producción y adquirir niveles de responsabilidad mayores, para lo cual tienen que poner en juego más y nuevas capacidades. El mercado de trabajo se ha vuelto inestable, y los trabajadores enfrentan situaciones laborales cambiantes a lo largo de su vida activa: pueden ser asalariados, quedar desempleados, pasar a trabajar en forma independiente, o ser subcontratados, más muchas otras combinaciones posibles en términos de sus itinerarios laborales. Para “navegar” con éxito en estas cambiantes situaciones no alcanza ya con adquirir algunas pocas destrezas y conocimientos, sino que se requieren competencias más amplias que puedan ser aplicadas en distintos contextos y situaciones”.

En ese sentido siguiendo el Plan Estratégico del SENA 2007-2010 en las Orientaciones Estratégicas, es nuestro encargo como docentes gestionar “…el aprendizaje a lo largo de la vida, de tal forma que se le facilite al alumno la movilidad por los diferentes escenarios del aprendizaje y campos ocupacionales, en respuesta a las exigencias de una economía basada en el conocimiento”

En tal sentido, la Institución, acoge entre las didácticas activas, la Formación por Proyectos, como una estrategia metodológica nuclear o aglutinadora de otras estrategias, como modelo formativo para orientar programas de formación, que puede brindar una respuesta acertada a las nuevas demandas que emergen de los cambios socioeconómicos provocados por la globalización y la sociedad del conocimiento y la información.